Tu espiración en la aurora
Con el canto de las avecillas...
Con tú mirar al firmamento volado las gaviotas
Con tu audición por el eco de la naturaleza
Con tú oliscar en el aroma a lavanda
Con tu paladar con savia de fruta
Con tus manos palpar el boscaje verdoso
Con tus huellas por tu caminar...
Por los senderos imprevisibles
Agradece… tu vida es un prodigio.
Mujer bendita.
Mujer bendita.